La reforma del Código Penal va ya camino del Senado sin incluir la propuesta de la cadena perpetua revisable, después de que el Congreso la aprobara sin consenso. Los socialistas contaron con el apoyo de CiU, ERC, Coalición Canaria y UPN, mientras que PP, IU-ICV, BNG y UPyD optaron por abstenerse. Por su parte los diputados del PNV y NaBai votaron en contra. En total, 180 diputados votaron a favor, 7 en contra y 146 se abstuvieron.
El portavoz socialista de Justicia, Julio Villarrubia, no ocultó su disgusto por la abstención del mayor partido de la oposición, ya que los socialistas y el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, habían puesto mucho interés en ir de la mano del PP en esta reforma. Dos enmiendas completas y 29 transaccionales tienen la firma del PP. Su portavoz, Federico Trillo, argumentó que “hay demasiadas sombras e inquietudes”. Para el PSOE, es una muestra de “deslealtad”. “España no se merece una oposición como ustedes”, espetó el socialista Julio Villarrubia al popular Federico Trillo.
El argumento fundamental del PP para no apoyar la reforma se basa en la no inclusión de la llamada cadena perpetua revisable. El endurecimiento en los delitos de terrorismo y de abusos sexuales no fueron suficientes para el PP, tales como la libertad vigilada durante diez años, después de cumplir las penas. También se establece la imprescriptibilidad de esos delitos. Precisamente este endurecimiento es el que ha llevado al PNV y a NaBai a votar en contra de la reforma del Código Penal.
El castigo por corrupción política, tras el escándalo del Gürtel o la trama balear, también se endurece. Aumentan las penas para los cargos públicos o funcionarios que cometan cohecho. Ahora serán penados con cárcel en lugar de solo multa e inhabilitación. También se tipifica como delito el soborno entre particulares y se prevé la responsabilidad penal de las personas jurídicas, a excepción de Estado, administraciones públicas, partidos políticos y sindicatos. El fin es que no se utilice como arma política.
El acuerdo del PSOE con CiU para castigar con pena de prisión durante los fines de semana a los reincidentes en hurtos por valor inferior a 400 euros fue el punto más polémico y criticado por otros grupos, singularmente por Emilio Olabarria, del PNV.
Pero no solo hay endurecimiento. También se han aligerado algunas penas. Por ejemplo, se suprimen las penas de prisión para los manteros, cuando el beneficio sea inferior a 400 euros.
TÉCNICAMENTE BUENA
El profesor de Derecho Penal de la Universidade de A Coruña, Antonio Suárez Mira, calificó la reforma de “técnicamente buena”. “Denota una gran preocupación por las víctimas. El derecho penal siempre se ha fijado más en el trato del penado, pero ahora aumenta la protección de éstas”, aseguró.
Suárez Mira destacó la tipificación de nuevos delitos, la adaptación del código a los compromisos internacionales y el endurecimiento de las penas para delitos graves. “Por primera vez se castiga el acoso laboral e inmobiliario, los transplantes ilegales, se tipifica de forma específica la trata de personas y se refuerza la protección penal a las mujeres, castigando expresamente a quienes atenten contra la libertadsexual de una persona”, defendió.
Por el contrario, Amnistía Internacional expresó ayer su profunda decepción ante un texto que “deliberadamente olvida la incororación expresa del delito de desaparición forzada”.