Los españoles gastarán una media de 50 euros en las rebajas de verano, frente a los 65 euros del año pasado, lo que supone un 23 por ciento menos.
Esta es la principal conclusión de un estudio de la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (FUCI), realizado a nivel nacional para conocer el desembolso económico que tienen previsto hacer los ciudadanos en la temporada de rebajas, que comienzan mañana en la Comunidad de Madrid y que se generalizarán por todo el país el próximo 1 de julio.
Esta radiografía de los consumidores ha sido realizada mediante una encuesta a 1.500 consumidores, entre la segunda quincena del mes de mayo y la primera semana de junio, ha informado FUCI en un comunicado.
Madrid, País Vasco y Cataluña serán las autonomías más consumistas, mientras que Murcia, Extremadura y Canarias serán las que menos gasto harán durante los dos meses que duran las rebajas.
Según la presidenta de FUCI, Agustina Laguna, "el hecho de que si bien ha habido un considerable aumento de los consumidores que tienen pensado comprar en rebajas también va a haber un significativo descenso en el gasto previsto. Los 50 euros de media que gastarán los españoles suponen el importe más bajo desde la llegada del euro".
"Estos datos evidencian la crisis económica que sufren los consumidores españoles que han pasado de ir a las rebajas para renovar su vestuario a comprar lo absolutamente imprescindible por su maltrecha economía", ha señalado.
Respecto a las decisiones de compra, nueve de cada diez españoles comprará algo en rebajas, y son las mujeres las que lo harán en mayor porcentaje, en un 94% frente al 81% de los hombres.
La ropa y/o complementos siguen siendo los artículos más demandados en rebajas por los consumidores, mientras que los artículos de tecnología y mobiliario pierden adeptos.
Sobre las medidas de ahorro previstas, el 19% de los consumidores evitará las marcas, un 37% comprará lo que esté más rebajado y un 39% sólo lo que necesita.
Por otro lado, un año más se observa un importante desconocimiento de los derechos y deberes de los consumidores.
Así, sólo un 19% de los españoles conoce que la garantía de los bienes de carácter duradero es de dos años.
La FUCI aboga por un consumo racional, calculado y exigente durante las rebajas y recuerda que éstas son en el precio y no en la calidad.
Para ello, la organización de consumidores recomienda fijar un presupuesto previo y respetarlo; hacer una lista de las compras; revisar con atención las etiquetas; y observar que en cada producto se indica, de forma clara, el precio anterior y el precio rebajado o, en su defecto, el porcentaje de rebaja.
Los medios de pago, tales como tarjetas, seguirán en vigor durante las rebajas, salvo que se indique en el establecimiento, de forma visible, su no aceptación.
El establecimiento debe aceptar las devoluciones y/o cambios de los productos defectuosos, cuya venta está prohibida en rebajas, señala la FUCI.
No hay comentarios:
Publicar un comentario