Aunque se esperaba que la inflación se situase en negativo en el segundo trimestre, ha sorprendido que se haya producido ya en marzo", señaló la CEOE, que destaca que la intensidad de la desaceleración está siendo más fuerte de lo esperado, lo que demuestra la "gravedad" de la situación económica y su reflejo sobre los precios.
En su opinión, la notable caída del precio del petróleo con respecto a los mismos meses del año anterior, incluso aunque los precios del crudo se mantuviesen o repuntasen ligeramente, hará que las tasas de variación interanual de los productos energéticos sigan mostrando "significativas caídas".
Además, añade que la debilidad de la demanda nacional continuará limitando el avance de los precios, lo que supondrá caídas adicionales del índice general durante el segundo y probablemente parte del tercer trimestre.
CEOE recordó que, desde que existe serie de IPC, la economía española no había visto descensos interanuales de precios, lo que refleja, según su análisis, la "grave" crisis que atraviesa en este momento y que la llevará a registrar una contención de precios "históricamente desconocida".
"Todo ello impondrá esfuerzos extraordinarios de reducción de costes, a fin de mantener la presencia de cualquier empresa en los mercados y de sus trabajadores", manifestó la patronal, tras insistir en que, por ello, el incremento de los salarios debería tener un tratamiento "excepcional y adecuado a las circunstancias actuales", que derivase, en el mejor de los casos, en mantener la competitividad de las empresas.
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