Tres directivos de Fiat que estaban retenidos por algunos trabajadores en un concesionario de Bruselas han dejado ya el establecimiento sin problemas, informó la cadena de televisión RTL-TVI. La retención se produjo alrededor de las 13.45 hora local (11.45 GMT) en el transcurso de unas negociaciones por el plan de despidos que prevé la compañía para 24 de los 80 trabajadores de ese concesionario, dependiente directamente de Fiat.
Los directivos son dos belgas y un italiano llegado expresamente de Turín para esta negociación, y salieron sin problemas hacia las 16:00 GMT del concesionario Italian Automotive Center (AIC), que se encarga de la venta y mantenimiento de las marcas Fiat, Lancia y Alfa Romeo.
Martin Willems, uno de los negociadores sindicales, reconoció que el clima había sido "tenso" pero aseguró que "no hubo ninguna violencia".
La negociación se complicó porque los trabajadores y los sindicalistas querían evitar despidos directos y buscaban medidas como recolocaciones en otros centros o prejubilaciones, algo que la empresa rechazaba, indicó RTL. Por ello, los trabajadores llegaron a decir a los directivos que no dejarían el lugar hasta lograr algún tipo de compromiso.
Los trabajadores querían "avances reales" y han pedido a la dirección "que asuma sus responsabilidades", declaró a la agencia Belga Emanuele Agostini, del sindicato socialista FGTB, quien negó que se hubiera producido un secuestro.
Según la compañía italiana, la negociación del plan de despidos en el concesionario de Bruselas se desarrolla desde el pasado diciembre y no ha sido hasta hoy que los trabajadores han decidido encerrar a los directivos en un cuarto, "siguiendo el modelo francés".
Los directivos son dos belgas y un italiano llegado expresamente de Turín para esta negociación, y salieron sin problemas hacia las 16:00 GMT del concesionario Italian Automotive Center (AIC), que se encarga de la venta y mantenimiento de las marcas Fiat, Lancia y Alfa Romeo.
Martin Willems, uno de los negociadores sindicales, reconoció que el clima había sido "tenso" pero aseguró que "no hubo ninguna violencia".
La negociación se complicó porque los trabajadores y los sindicalistas querían evitar despidos directos y buscaban medidas como recolocaciones en otros centros o prejubilaciones, algo que la empresa rechazaba, indicó RTL. Por ello, los trabajadores llegaron a decir a los directivos que no dejarían el lugar hasta lograr algún tipo de compromiso.
Los trabajadores querían "avances reales" y han pedido a la dirección "que asuma sus responsabilidades", declaró a la agencia Belga Emanuele Agostini, del sindicato socialista FGTB, quien negó que se hubiera producido un secuestro.
Según la compañía italiana, la negociación del plan de despidos en el concesionario de Bruselas se desarrolla desde el pasado diciembre y no ha sido hasta hoy que los trabajadores han decidido encerrar a los directivos en un cuarto, "siguiendo el modelo francés".
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