lunes, 11 de mayo de 2009

Aceite de oliva, frutos secos y pescado reducen el riesgo de ceguera por edad

Una dieta que incluya regularmente pescado, frutos secos y aceite de oliva y evite las grasas trans (ácidos hidrogenados), puede reducir el riesgo de degeneración macular cuando se envejece, según artículos que publica hoy la revista Archives of Ophthalmology.

Se calcula que unos 3 millones de personas en Estados Unidos se encuentran en las etapas avanzadas de la degeneración macular relacionada con la edad -un problema que afecta a la mácula, la parte del ojo que permite ver los detalles pequeños-.

Esta afección es la causa principal de la pérdida grave de visión en las personas mayores de 65 años. Entre los factores de riesgo se incluyen la edad, marcadores genéticos o el hábito de fumar.

En uno de los estudios, un equipo encabezado por Jennifer Tan, de la Universidad de Sydney (Australia), analizó los casos de 2.454 participantes que completaron encuestas sobre su ingesta de varios ácidos grasos. Se usaron fotografías digitales de la retina para evaluar el desarrollo de la degeneración macular cinco y 10 años después de la encuesta, que se efectuó entre 1991 y 1994.

Después de los ajustes por edad, sexo y tabaquismo, el consumo de una porción semanal de pescado apareció vinculado con una reducción del 31 por ciento de desarrollo temprano de la degeneración macular. Esa relación fue incluso mayor en los individuos con una baja ingesta de ácido linoleico, un ácido graso omega 6 no saturado que se encuentra principalmente en los aceites vegetales.

El hecho de comer de una a dos porciones semanales de frutos secos (nueces, almendras, etc) provocó una reducción del 35 por ciento en el riesgo. En el otro estudio, el equipo encabezado por Elaine W.T. Chong, del Centro para la Investigación del Ojo en Australia, analizó los datos de 6.734 individuos con edades de 58 a 69 años.

Entre 1990 y 1994 se evaluó el consumo de nutrientes de los participantes a partir de un cuestionario sobre la frecuencia de ciertas comidas, y se hizo el seguimiento para detectar la degeneración macular entre 2003 y 2006.

Los individuos que consumieron niveles más altos de grasas trans no saturadas -las que se encuentran en productos horneados y comidas precocinadas-, fueron los que tenían más probabilidades de estar en la etapa avanzada de la degeneración macular.

Por contra, los que habían consumido más ácidos omega 3 grasos tenían más posibilidades de estar en la etapa inicial de la enfermedad. "Un consumo de 100 mililitros o más de aceite de oliva por semana apareció vinculada con una menor prevalencia de tener siquiera la degeneración macular en etapa temprana", señala el artículo.

En cambio, este estudio señaló que los investigadores "no encontraron asociaciones significativas entre la degeneración macular y el consumo de pescado, total de grasas, manteca o margarina".

La investigación científica ha demostrado que los ácidos grasos trans no saturados aumentan el riesgo de enfermedad coronaria cardiaca mediante sus efectos sobre los niveles de colesterol y, posiblemente, por inflamación. En cambio, se cree que los ácidos grados omega 3 protegen contra daños de la retina y por lo tanto reducen el riesgo de degeneración macular.

No hay comentarios: