Cualquier ciudadano podrá consultar, a partir del 1 de marzo, las actividades privadas de los parlamentarios. El Congreso publicará desde ese día los datos en su página web.
Cerca de un centenar de diputados, a requerimiento de la comisión del Estatuto del Diputado, han actualizado su declaración de actividades privadas. El propio presidente de la cámara baja, José Bono, ha comunicado que tiene la intención de publicar sus memorias, y percibir por ello una remuneración. Según el criterio que ha aplicado el órgano de control de los diputados, sí se permite recibir emolumentos por escribir libros, aunque no por participar en tertulias de las distintas radios y televisiones públicas.
Muchos diputados han declarado participar en este tipo de programas informativos, aunque sólo ingresan a cambio una cantidad por concepto de «gastos». También se permiten cobrar como conferenciante «esporádica» o como concejal, aunque sólo perciben dietas por asistencia a plenos.
Entre los que han regularizado su situación se encuentra el popular Gerardo Conde, que ha renunciado a ser administrador único de la sociedad Geslander, Proyectos de edificación S. L.. El ex titular de Justicia Mariano Bermejo ha especificado que cobra la pensión de ex ministro, compatible con el sueldo de diputado.
El ministro Alfredo Pérez Rubalcaba ha dejado constancia de que en abril de 2009 renunció a ser vocal de la Fundación I+D+i. El ex ministro del PP Miguel Arias Cañete aclaró que «nunca» ha tomado posesión como miembro del consejo asesor de Bao & Partners Siguives Internacional, empresa dedicada, entre otros objetivos, a la caza de talentos.
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