Costó tres repreguntas, pero al final Mariano Rajoy sugirió, sin llegar a afirmarlo con contundencia, que estaría de acuerdo con una fórmula de abaratamiento del despido para luchar contra la excesiva temporalidad del mercado de trabajo español. Fue en el programa Los Desayunos de TVE, cuando la periodista Ana Pastor insistió para intentar que se mojara en un asunto que el PP trata con suma cautela. Rajoy llegó a decir que estaba a favor de que haya una indemnización progresiva, en función de los años trabajados.
Es decir, que en los primeros años, si hay despido, se cobren menos de los 45 días por año que marca el contrato fijo tipo, para llegar a esos 45 a partir de un cierto número de años en la empresa. En la actualidad existe un contrato fijo especial de 33 días, instaurado en 1997, pero apenas se utiliza (13%). Más del 30% de los contratos se realizan de forma temporal, por lo que no hay indemnización.
Rajoy se apunta así a una de las propuestas que manejan los expertos, aunque el PP, preguntado sobre el asunto, evitó dar más explicaciones. De hecho, no está previsto que este partido proponga ninguna fórmula específica ni lleve al Congreso ninguna propuesta concreta sobre el despido.
El PP sólo pide una reforma laboral para reducir la temporalidad y facilitar que baje el paro. Cree que son empresarios y sindicatos quienes deben ponerse de acuerdo sobre la fórmula. En caso de que no lo logren, señalan los populares, es el Gobierno quien debe proponer su propia solución, no la oposición.
Rajoy también dijo que él congelaría el sueldo de los funcionarios (en 2009 ha subido sólo un 0,3%).
Es decir, que en los primeros años, si hay despido, se cobren menos de los 45 días por año que marca el contrato fijo tipo, para llegar a esos 45 a partir de un cierto número de años en la empresa. En la actualidad existe un contrato fijo especial de 33 días, instaurado en 1997, pero apenas se utiliza (13%). Más del 30% de los contratos se realizan de forma temporal, por lo que no hay indemnización.
Rajoy se apunta así a una de las propuestas que manejan los expertos, aunque el PP, preguntado sobre el asunto, evitó dar más explicaciones. De hecho, no está previsto que este partido proponga ninguna fórmula específica ni lleve al Congreso ninguna propuesta concreta sobre el despido.
El PP sólo pide una reforma laboral para reducir la temporalidad y facilitar que baje el paro. Cree que son empresarios y sindicatos quienes deben ponerse de acuerdo sobre la fórmula. En caso de que no lo logren, señalan los populares, es el Gobierno quien debe proponer su propia solución, no la oposición.
Rajoy también dijo que él congelaría el sueldo de los funcionarios (en 2009 ha subido sólo un 0,3%).
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