La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) advirtió hoy de que Interior ha propuesto expulsar al ex secretario general de la organización Joan Miquel Perpinyà por negarse a someterse a un reconocimiento médico. Para la AUGC, las imputaciones, además de ser "radicalmente inciertas", pretenden "pasar factura" a Perpinyá por su actividad asociativa y su participación en la gran manifestación de guardias civiles del 20 de enero de 2007.
En un comunicado, la AUGC avisó de que la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil ha propuesto imponer a Perpinyá la sanción de "separación del servicio", que supondría su expulsión del Instituto Armado. "Se le pretende sancionar por no haber acudido a un reconocimiento médico, que no le fue notificado y que desconocía, circunstancias que han quedado acreditadas en la actividad probatoria llevada a cabo en el expediente", defendió.
A juicio de la asociación mayoritaria del Instituto Armado, la Dirección General está utilizando la potestad disciplinaria "con fines distintos" a los previstos en el ordenamiento jurídico y está incurriendo, de este modo, en "desviación de poder". En este contexto, la AUGC remarcó el papel de su ex secretario general en la defensa de los derechos fundamentales y libertades de los guardias civiles, así como su "destacada participación" en la concentración del 20 de enero de 2007.
Perpinyá era el máximo responsable de la AUGC cuando ésta convocó una gran manifestación en Madrid a la que acudieron unas 10.000 personas, 3.000 de ellas agentes de uniforme, que reclamaban la aprobación de las medidas de modernización del Cuerpo que el PSOE había incluido en su programa electoral. Un total de 21 responsables de la asociación fueron expedientados, aplicándose la sanción mayor contra Joan Miquel Perpinyá.
La AUGC recordó que Interior aplicó una sanción de empleo y sueldo a Perpinyá por su participación en la citada manifestación. Dicho esto, ofreció al ex líder su "incondicional" apoyo, al tiempo que anunció que sus servicios jurídicos estudian adoptar medidas legales para evitar la utilización "artificiosa" del régimen disciplinario, "con una clara, notoria y manifiesta intencionalidad de perseguir a los representantes de AUGC". "Parece que para la Dirección General hay que seguir castigándolo y todo vale para ello", concluyó.
En un comunicado, la AUGC avisó de que la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil ha propuesto imponer a Perpinyá la sanción de "separación del servicio", que supondría su expulsión del Instituto Armado. "Se le pretende sancionar por no haber acudido a un reconocimiento médico, que no le fue notificado y que desconocía, circunstancias que han quedado acreditadas en la actividad probatoria llevada a cabo en el expediente", defendió.
A juicio de la asociación mayoritaria del Instituto Armado, la Dirección General está utilizando la potestad disciplinaria "con fines distintos" a los previstos en el ordenamiento jurídico y está incurriendo, de este modo, en "desviación de poder". En este contexto, la AUGC remarcó el papel de su ex secretario general en la defensa de los derechos fundamentales y libertades de los guardias civiles, así como su "destacada participación" en la concentración del 20 de enero de 2007.
Perpinyá era el máximo responsable de la AUGC cuando ésta convocó una gran manifestación en Madrid a la que acudieron unas 10.000 personas, 3.000 de ellas agentes de uniforme, que reclamaban la aprobación de las medidas de modernización del Cuerpo que el PSOE había incluido en su programa electoral. Un total de 21 responsables de la asociación fueron expedientados, aplicándose la sanción mayor contra Joan Miquel Perpinyá.
La AUGC recordó que Interior aplicó una sanción de empleo y sueldo a Perpinyá por su participación en la citada manifestación. Dicho esto, ofreció al ex líder su "incondicional" apoyo, al tiempo que anunció que sus servicios jurídicos estudian adoptar medidas legales para evitar la utilización "artificiosa" del régimen disciplinario, "con una clara, notoria y manifiesta intencionalidad de perseguir a los representantes de AUGC". "Parece que para la Dirección General hay que seguir castigándolo y todo vale para ello", concluyó.
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